La base de la ración del caballo consiste en forrajes bastos de alta calidad. La mayor parte del aporte energético total del caballo procede de la digestión de la fibra del forraje. Sin embargo, los forrajes no higiénicos, de baja calidad, pueden contener mucho polvo que el tracto respiratorio del caballo no tolera. Como resultado, los caballos pueden desarrollar enfermedades crónicas que afectan a su salud y rendimiento.
El sistema respiratorio del caballo
El sistema respiratorio del caballo está formado por la nariz, la boca, la faringe, la laringe, la tráquea, los bronquios, los alvéolos y los pulmones 1. La función principal del sistema respiratorio es suministrar oxígeno al organismo y eliminar el dióxido de carbono del cuerpo. Cuando el caballo respira, ingiere entre 4 y 5 litros de aire 2. Sin embargo, la capacidad total de los pulmones es mucho mayor, unos 42 litros 3. El cuerpo necesita oxígeno para producir energía. La energía es importante para el mantenimiento del cuerpo, los procesos metabólicos y actúa como combustible para los músculos cuando el caballo se mueve. Por lo tanto, cuando el caballo empieza a moverse, el cuerpo tiene una mayor necesidad de oxígeno, lo que significa que el caballo respira más aire cuando el cuerpo se está moviendo activamente 4. El trote y el paso son más rápidos. La investigación ha demostrado que el paso y el trote tienen poco efecto en la respiración del caballo. Principalmente, el galope tiene un efecto sobre la respiración y hace que el caballo inhale más aire 5.
El efecto del forraje en las vías respiratorias del caballo
Las vías respiratorias del caballo también son una parte importante del sistema inmunitario. Las vías respiratorias forman parte del sistema inmunitario innato, que es el primero en reaccionar ante la entrada de patógenos. Cuando los patógenos entran en las vías respiratorias, el cuerpo reacciona para hacer que el patógeno sea inofensivo 6. Cuando pequeñas partículas (polvo) entran en las vías respiratorias, el sistema respiratorio también reacciona a ello, lo que tiene un efecto sobre la salud del sistema respiratorio. Los forrajes de baja calidad pueden contener mucho polvo que el caballo inhala.
Las partículas de polvo más grandes que entran en el tracto respiratorio son eliminadas por el sistema respiratorio. Las partículas de polvo más pequeñas acaban en los alvéolos, donde provocan una reacción inflamatoria 7. En los alvéolos se produce el intercambio de oxígeno y productos de desecho, por lo que tienen una función importante en el organismo. La inhalación de pequeñas partículas de polvo, por ejemplo procedentes de forrajes de mala calidad, afecta a la salud de las vías respiratorias del caballo y provoca síntomas como estornudos o tos.
Si el caballo está expuesto al polvo entre 5 y 7 horas, esto aún no afecta a su salud 8. Si se traslada al caballo a un entorno más limpio a tiempo, las vías respiratorias pueden recuperarse. Pero si un caballo inhala polvo del entorno durante un periodo de tiempo prolongado, lo que irrita las vías respiratorias, existe la posibilidad de que desarrolle una enfermedad respiratoria crónica 9. Los síntomas de la enfermedad respiratoria crónica incluyen tos, estornudos, producción excesiva de mucosidad, disminución del rendimiento y respiración dificultosa.
Forraje y gestión para favorecer la salud respiratoria
El forraje es la base de la ración del caballo y, por tanto, una parte importante de la dieta. Existen distintos tipos de forraje, como el heno, el ensilado, la alfalfa y la pulpa de remolacha. Además, la calidad del forraje varía. Como ya se ha mencionado, un forraje de mala calidad puede contener mucho polvo, lo que afecta al sistema respiratorio del caballo. Por lo tanto, es importante asegurarse de que el forraje con el que alimenta a su caballo es de buena calidad. También hay varias formas de conseguir que el forraje sea menos polvoriento.
En lugar de heno, que es más probable que contenga más polvo porque es más seco, puede optar por ensilado. El ensilado es un tipo de forraje que se seca parcialmente después de cortar la hierba y se envasa en plástico. En el ensilado tiene lugar un proceso de fementación bajo la influencia del oxígeno que se inhibe envolviéndolo en plástico. Como resultado, el ensilado se conserva más tiempo. Debido a que el ensilado no se seca tanto como el heno, el ensilado es más húmedo, lo que significa que el contenido de materia seca es menor y el forraje contiene menos polvo 10. Por lo tanto, el ensilado es una buena alternativa para los caballos con afecciones respiratorias y que son sensibles al polvo o para prevenir las afecciones.
Los ajustes en el manejo del caballo evitarán las afecciones respiratorias o reducirán los síntomas de los caballos con afecciones crónicas. A veces no es posible seleccionar forrajes bastos de alta calidad y éstos contienen mucho polvo. Un método de gestión comúnmente utilizado consiste en remojar el forraje en agua para reducir la cantidad de polvo. Si bien es cierto que este método reduce el polvo en el forraje, también reduce la cantidad de nutrientes en el alimento 11. Los estudios han demostrado que vaporizar el heno es una mejor opción para reducir el polvo en el forraje, pero también para garantizar que el forraje retenga los nutrientes 12. Por lo tanto, es importante mantener al caballo en un lugar fresco y seco.
Por lo tanto, es importante mantener el entorno del caballo lo más higiénico posible y asegurarse de que pueda respirar la menor cantidad de polvo posible. Hay varias formas de reducir el polvo en el entorno del caballo y en el forraje. Esto tiene un efecto positivo en la salud respiratoria y el rendimiento del caballo.
Referencias
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